Los Columbus Blue Jackets tienen una larga historia relacionada con sus suéteres, siendo una pieza fundamental en la identidad de los equipos. Algunos de estos suéteres son clásicos y otros son recuerdos de mal gusto, pero todos forman parte de la rica historia de este equipo de hockey.
En nuestra serie anual, nos enfocamos en los mejores y peores suéteres de la historia de cada equipo. Hoy, vamos a explorar los suéteres de los Columbus Blue Jackets a lo largo de los años.
Los Blue Jackets tienen un suéter que ha conquistado el corazón de la mayoría de los fanáticos de Columbus: los suéteres Cannon. Estas piezas icónicas surgieron en la temporada 2010-11 y se han convertido en un favorito entre los seguidores del equipo.
El apodo de Columbus, Blue Jackets, tiene raíces en la historia de la Guerra Civil estadounidense, donde el estado de Ohio tuvo un papel crucial en la lucha por la Unión. Según la base de datos de uniformes de la NHL, hay una frase grabada en el interior del cuello trasero que dice: «¡Luchamos, marchamos!».
Muchos fanáticos querían que estos suéteres Cannon se convirtieran en los uniformes habituales del equipo. A pesar de las dudas sobre el color crema, este se complementa perfectamente con el diseño de los suéteres.
Al observar los inicios de los Blue Jackets en la liga para la temporada 2000-01, vemos un logotipo principal único que incluía estrellas, un palo de hockey e integraba las iniciales «C», «B» y «J». Con una franja roja en la parte inferior y detalles en rojo y blanco en los puños de las mangas, este suéter capturó la esencia del equipo.
Un detalle fascinante es el escudo alternativo que muestra al avispón llamado Stinger vistiendo el uniforme militar de la Unión en el hombro. Este homenaje a la historia de la ciudad y su participación en la Guerra Civil añade un elemento único a la colección de suéteres de los Blue Jackets. Es interesante ver cómo la historia y la identidad de un equipo se reflejan en sus uniformes a lo largo de los años.