PWHL Minnesota vuelve a estar en el centro de atención, pero esta vez por un motivo poco común. El gerente general y entrenador en jefe, Ken Klee, se encuentra en medio de una situación incómoda tras las acusaciones de un ex miembro del personal que afirmaba que existía un «ambiente de trabajo tóxico y poco profesional» en el club.
El camino de Ken Klee hacia la PWHL de Minnesota es interesante. Este ex jugador de la NHL asumió el rol de entrenador principal justo antes del inicio de la temporada. Tras una exitosa carrera como defensa en equipos como los Washington Capitals y los Toronto Maple Leafs, Klee decidió dedicarse al entrenamiento. Incluso estuvo detrás del banco del equipo femenino de EE. UU. en la Copa de las Cuatro Naciones en 2015 y 2016.
Charlie Burggraf originalmente ocupaba el puesto de entrenador principal en Minnesota, pero renunció a una semana del primer partido. Esto abrió la oportunidad para que Klee tomara las riendas del equipo. Cuando se postuló para el puesto, Klee tenía en mente asumir también el rol de gerente general. Trabajó junto a Natalie Darwitz, quien fue posteriormente despedida en junio, tras lo cual surgieron tensiones entre Klee y Darwitz.
Un ex miembro del personal comentó a Las Noticias del Hockey: “Cuando Charlie se fue y Ken llegó, no podría haber sido más opuesto. Arrogante, presumido… desde ese día en adelante comenzó a haber una división en mi opinión; división en el personal, división en los jugadores, se convirtió en un ambiente muy tóxico”. Estos testimonios señalan la tensa relación entre Klee y Darwitz.
Las acusaciones actuales contra Klee han generado revuelo en el club. Miembros anónimos del personal expresaron críticas contundentes hacia la actitud de Klee, mientras que alababan el trabajo de Darwitz. La revisión realizada por la PWHL evidenció discrepancias en la percepción del ambiente laboral en el club.
Tras la primera denuncia, más testimonios se sumaron, detallando situaciones incómodas protagonizadas por Klee. Se asegura que utilizó un término inapropiado en una conversación, apodó a un jugador más joven como «Dumbo» y realizó comentarios racistas durante la visualización de una película junto a otro equipo.
Estas acusaciones han sacudido a la PWHL Minnesota, dejando en entredicho la reputación de Ken Klee y generando debate dentro de la organización. Es crucial abordar estas denuncias con seriedad y transparencia para preservar la integridad del club y promover un ambiente laboral sano y profesional para todos los involucrados.